Gratitud a nuestra primera alianza

Cosmel Merino y su familia llevan más de 25 años cultivando café con dedicación y amor por la tierra. Su historia está llena de aprendizajes, desafíos y aventuras, como la de cualquier caficultor comprometido con su oficio.

Hoy, esa historia florece en la finca Tangará, un espacio vivo que invita a reconectar con la naturaleza y con lo esencial. Allí, la familia Merino te recibirá con los brazos abiertos. Han preparado un lugar especial para que puedas acampar entre los sonidos del bosque, respirar aire puro y vivir el campo desde dentro.

Podrás recorrer sus senderos y aprender de primera mano sobre el café, el cacao y la vida rural —todo explicado con la sabiduría que solo se adquiere al caminar la tierra.

Y como cierre perfecto, te llevarán a nadar en las aguas cristalinas del río Palanda, que bordea la finca con su frescura y belleza natural.
Si decides quedarte a dormir, prepárate para un espectáculo inolvidable: un cielo estrellado y limpio, libre de contaminación lumínica, que te recordará lo grande que es el universo y lo pequeño que necesitamos para ser felices.

Una experiencia transformadora. Un reencuentro con la vida.